miércoles, 9 de mayo de 2012

Solo una reflexión sobre el hombre de Sri Lanka en Maiquetía

Si no es Chávez o Capriles no se es noticia. Esto lo volví a evidenciar cuando el martes una amiga me envió un video acerca de una persona de Sri Lanka que lleva atrapada 3 o 4 meses (según el copy and paste de algún medio nacional) en el aeropuerto internacional de Maiquetía. Ella me decía: “amiga esto está pasando ahorita, ¿ustedes pueden hacer algo?”

Inmediatamente escribí no solo a los encargados de la ong donde trabajo, sino a algunas personas que se desempeñan en medios de comunicación de este país para ver si podían investigar la veracidad de esta información, entiendo que en muchos casos no dependía de ellos incluir este tema en la pauta del día. Por ser un video publicado en el canal de youtube de la banda de música Los Pericos, muchos dudaron, y no actuaron.

Ese martes no me aventuré a ir a Maiquetía, y lo lamenté.

Ayer al conocer que la agencia de noticias EFE publicó una nota el mismo martes y que inmediatamente todos los medios de mi país hicieron el respectivo copy and paste empecé a experimentar una sensación de decepción, mezclada con rabia, porque resulta que es mejor lo fácil, a ir al aeropuerto a investigar, buscar la noticia. ¡Claro! La voz de los excluidos no es noticia, y menos si es de otro país distante y poco conocido, se confirma la máxima “lo que no se conoce, no se ama”. Porque si a nosotros nos cuesta tanto que nos escuchen, imagínense a alguien de Sri Lanka que ni siquiera habla español, de color chocolate oscuro, de otra cultura y de un continente lejano al nuestro.

¿Cómo pudo este señor estar tres meses invisible en nuestros medios? Yo aun no me explico, ni tampoco he encontrado alguna información anterior a la que se viene publicando desde el martes. Que por cierto ya me tiene agotada la analogía que se viene haciendo en los medios entre este srilankés y el personaje de Tom Hanks de la película Terminal.

En hora buena que no solo informé a los medios sino que también lo hice a las personas con las que trabajo, y ya se está buscando alguna solución. La situación es complicada porque Sri Lanka no tiene representación diplomática en este país, el hombre no tiene visa para ingresar a Venezuela, razón por la que está retenido, y sumado a esto no existe vuelo directo de Caracas hasta allá, y para hacer escalas el hombre también necesitaría visa.

Me hago la misma pregunta que todos: ¿cómo pudo ocurrir algo así? Algunas informaciones indican que el señor viene de Damasco, donde por cierto si existe vuelo directo Caracas-Damasco por línea aérea Conviasa. ¿No habría que investigar qué pasó en este hecho?

Sería bueno que el diario Panorama verificara esta información: “El inconveniente del asiático comenzó hace casi 6 meses en México desde donde fue deportado, pero al llegar a Venezuela, el destino de su pasaje ya no era viable, por lo que quedó allí, a la espera de mejores horizontes”.

Están mezclando información de diversas notas y tomando declaraciones del video, donde incluso hay traducciones erróneas, por ejemplo uno de los integrantes de Los Pericos dice que Conviasa es una ong, que asumo que por falta de conocimiento de nuestras aerolíneas llega a esa conclusión.

Un llamado a los medios de comunicación de Venezuela, por respeto a la dignidad de las personas ¡Investiguen! Un llamado a las autoridades competentes, ¡Investiguen! Bien sabemos que las mafias internacionales trafican con los sueños de las personas que buscan mejorar sus condiciones de vida. Deportar a las víctimas es lavarse las manos y dar la espalda a problemas globales como la trata de persona. ¡Investiguen! Es importante garantizar los derechos humanos de esta persona, y de todos los que llegan al país en estas condiciones.