De las cosas que uno escucha en el metro:
—Ahora salen embarazadas, le dan 700, se
lo sacan, y ya. Ese pana si es…— le dice una muchacha a dos amigas.
[El presidente de la República, Nicolás
Maduro, anunció el lunes 15 de enero de 2017 que las 151 mil 013 embarazadas
del país que están registradas en el sistema del Carnet de la Patria recibirán
un bono mensual de 700.000 bolívares durante el proceso de gestación. El jefe
de Estado acotó que para la fecha del parto, cada embarazada recibirá 1 millón
de bolívares, así como todo el apoyo médico, humano y logístico para dar a luz][1].
***
—Yuneiski si es mentirosa— dice un
muchacho.
—Que tiene 500 $ y 10 millones de bolívares.
Con eso no llega— le responde un hombre.
—Ella no tiene nada— le dice una mujer.
—De pana que así es la gente fanfarrona,
no tienen donde caerse muerta— concluye otra.
Y la conversación sigue.
—El viático que me dieron en el banco me
lo voy a parrandear— se ríe el muchacho.
—Guárdalo y sobrevives con lo que tienes.
—Eso alcanza para un pollo. Mejor hago
como una pana del trabajo. Compro una riqueza o un diablito y lo embotello para
el viaje.
—Sí, con eso aguantas el trayecto.
—El pan lo compro al final, cuando vaya
llegando la fecha para irme.
[Venezolanos trazan nuevo flujo
migratorio en América]
Epílogo
Escribo estos diálogos sueltos y me
percato que el martes pasado cuando iba a comprar el
ticket del metro entré en un lapsus severo. No sabía cómo pagar. Tenía un
billete de 1000 y otro de 500… Tuve que esperar a que una señora pasara primero
y pidiera para guiarme. Pagué con el de 500: “Me da 100 bolívares en ticket”.
La operadora me miró y me entregó 4 billetes de 100 y un montón de tickets: un
cartón con banda metálica que cuesta muchísimo más de lo que yo pagué. Mientras
tanto la gente pasaba por el torniquete, forzándolo, para no pagar. Respiré
profundo y me monté en el vagón sin aire, rezando para que no me diera el
ataque de pánico de otras veces, que siempre me obliga a bajarme muchas
estaciones antes de mi destino.
Este lunes, luego de
estar una hora tratando de montarme en un vagón o en una caminonetica, me
regreso a casa mientras todo pasa para salir de nuevo… Pero lo único que pasa
es que esta inoperancia, que arropa toda la política de nuestro país, hace que el
venezolano invierta grandes cuotas de energía para resolver lo fundamental para
vivir (comida, medicinas, transporte), y que esté centrado en su “aquí y
ahora”, sin horizonte. Como diría el padre Trigo, nos estamos elementarizando.
Notas
[1]http://www.ultimasnoticias.com.ve/noticias/comunidad/embarazadas-cobraran-bs-700-mil-por-cada-mes-gestacion/
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