jueves, 31 de octubre de 2019

Pomodoro


Me asomo en la puerta. En el taller de zia Benedetta no hay nadie pero la cocinita está encendida y tiene una olla llena de tomates en agua hirviendo. En la radio suena una ópera. La zia atraviesa otra puerta, se acerca a la mesa, saca los tomates de la olla, los pasa a un envase de plástico y deja que se enfríen. Son pomodoros de su propia cosecha, los últimos antes de que empiece el invierno, así que no han nacido tan grandes. Minutos después comienza el trabajo. La piel del tomate en un recipiente, las semillas en otro y los frutos desnudos en un sartén. Me uno al proceso. Pelamos decenas de tomates.

Septiembre 2019



En septiembre acogí un temporal. Las gotas podridas me salpicaron. Mi abuela conmigo ayudándome a cruzar la calle, yo con mi miedo y mis pies hinchados que no entran en los zapatos,  ella deteniendo los carros. La vi en sueños junto a su casa, las demandas de la gente, los baños, el vómito y el agua sucia.

Me refugio en Antonia Palacios con su Viaje al Frailejón, París y tres recuerdos y su poesía. Anoto frases que me guían en este remolino. Intento verbalizar lo que voy aprendiendo del ecofeminismo y voy a parar al lado de una comadre de colores indígenas, sabia, llana, purpura,  mujer. Gritamos por la vida de la Amazonia en la movilización mundial por el clima y me preparo para ir hasta ella verde, frondosa, saqueada, mujer en el estado Bolívar.

viernes, 11 de octubre de 2019

Gran Sabana



Y vuelvo a ti dolorosa, embriagada, saqueada, triste, manoseada, cercada Gran Sabana. Y me cuesta escuchar el idioma de brisa de las hojas y los cantos de los grillos, sapos, pájaros. Hay un luto verde suspendido en este territorio. Un lamento que sacude los cuerpos desde el 22 de febrero de 2019, el 8 de diciembre de 2018, desde hace mucho tiempo atrás. Llanto que llora a sus muertos, llanto que se junta con las lágrimas de los que atraviesan por primera vez la sabana para salir de Venezuela, sus ojos se conmueven ante tanta belleza y el duelo que los empieza habitar sale como cascada para juntarse con estos nuevos paisajes.