sábado, 29 de diciembre de 2018

De San Benito recuerdo...



De San Benito recuerdo…

Que se me metió la idea de verlos desde que vimos el documental “El Misterio de las Lagunas” de Atahualpa Lichy. Que al año siguiente, el 28 de diciembre, llegamos a Mucuchíes, juntos, porque queríamos estar. Que el 29 de diciembre madrugamos y nos fuimos hasta la punta de una montaña para ver bajar a los hombres, jóvenes, niños ataviados en sus trajes negros y rojos, la cara negrita y brillante cubierta de betún, y sus manos sosteniendo unos rifles artesanales.


Me acuerdo de la capillita pequeña y acogedora. De las decenas de cofradías que se encontraban abajo en el pueblo (“¡Mitivivo! Mira Ignacio que ahí fue donde hice los primeros talleres de teatro con Medatia”). De los giros, esos saltimbanquis que volaban con sus pies (y que hasta vi uno enamorado). De las mujeres en su danza ritual envueltas sus cintas de colores. Del santo negro que todos festejamos bailando. De la oblea que vendía el señor de ojos azules (hasta le podías poner Froot-Loops)

Recuerdo que no tenías barba. Que apenitas comenzábamos a entender este viaje porque cada uno estaba sanando. Pariéndose a sí mismo. Brazos abiertos en la tempestad. Arrebato de seguir la intuición. Porque tú y Mérida son los lugares a los que siempre querré volver.

Aún duelen los oídos por tanta detonación, aún arden los dedos quemados, aún huele a  pólvora.

***
P.D: Ayer fue el Día de los Santos Inocentes. En Sanare salieron Las Zaragozas. En Caucagua salieron las parrandas.  Nuevamente las fiestas populares nos conectaron con lo ancestral.

Recordemos el significado de este día: la matanza de los niños menores de dos años nacidos en Belén (Judea), ordenada por el rey Herodes I el Grande con el fin de deshacerse del recién nacido Jesús de Nazaret.

¿Cuáles son los nombres de los inocentes de hoy? ¿Cuántos Herodes internos y externos matan la vida? Herodes vestido de oro, violencia, desnutrición, enfermedad, corrupción. 

Me sacudo la violencia aceptada. No la quiero.

Me conecto con la cultura, la religiosidad, la resistencia creativa, la vida.

Cierro los ojos y el sonido es una fiesta popular con mucha gente.







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